Libro
56 3. Propuesta de sistema electoral mixto para Colombia introdujo la cifra repartidora, ruvieron la intención de fortalecer y consolidar los parti– dos y movimientos políticos. Por otro lado, la reforma política de 2009, pendiente de reglamentación, tuvo como objetivo principal contrarreslar y castigar a los parlidos que pennitieran que fonna– ran parle de sus bancadas congresistas asociados a aclividades deliclivas, principal– mente aquellos vinculados con actividades para1nilitares. Iguahnente, se introdujeron cambios para hacer más exigente el reconocimiento y conservación de la personería jurídica de los partidos, que tuvo efectiva1nente la consecuencia de reducirlos en las elecciones del 14 de marzo del 20 10 a nueve, cifra que podría ser afectada con la en– trada en vigencia de un u1nbral del 3o/ci para las elecciones del 2014. Un ele1nento común de estas reformas es la perspectiva desde la gobemabilidad y el for– taleci.tniento de los partidos y mucho menos desde la perspectiva de los ciudadanos y sus organizaciones, la sociedad civil, y de cómo propiciar la racionalidad colectiva en ellos 35 • Indistintatnente de quien salió elegido, las elecciones legislativas del 2010 sufrieron de incontables proble1nas. Dada la co1nplejidad del tarjetón y de las múltiples elec– ciones que se realizaban el mis1no día, la confusión del electorado fue mayor. A la gente se le dificultaba saber por quién efectivamente estaba votando, debía escoger de un tarjetón impersonal, donde se debía conocer el número de identificación de la persona, y a qué partido pertenecía, y adetnás se debía escoger si se votaba por las circunscripciones especiales. El número de votos anulados y el largo e incierto proceso de emisión de las credenciales restaron considerablemente legitimidad a las elecciones, en un país donde las instituciones representativas cuentan ya con nive– les 1nuy bajos de legititnidad 36 • En ese sentido el proceso electoral requiere de una reingeniería cotnplela que signifique una simplificación considerable, especiahnenle desde el punto de vista del elector. T. Relación Principa1-Agente y ]os Distritos Uninominales 37 (DUN) El papel del elector, de los ciudadanos, ha brillado por su ausencia en su expresión en el Congreso y como los partidos incorporan la expresión colectiva de ellos. Frecuenlemen- 16 Generar racionalidad colectiva es de especial imporlancia en Colombia. En la comparación interna– ciona.1 realizada por medio de la Encuesta J\,1undial de Valores aparece como w10 de los países más bajos en racionalidad legal secular, la cual adicionalmente cayó entre 1997 y el '.!005. T .a mayoría de los datos se han ell.iraído de las dos mediciones del Capital Social de Colombia (Su– darsky, 2001, 2007), la primer-a realizada desde Planeación Nacional y la segunda desde la Funda– c ión Rcstrcpo Rareo. r n estas investigaciones aparecieron tres factores principales: Capital Social, Confie o sea Confianza y Control Indirecto del Estado, y Fenoval (Fe en Fuentes de Información No Validada). Este último factor núde que tanto las personas tienen confianza en ciertas fuentes de informac·ión sin tener cómo val idar socialmente Sil veracidad. I.os resultados de la investígación muestran cómo el primer factor aumentó un 106%, el segundo cayó un 99% y Fenoval aumento un 133%. Estos dos últimos resu.ltados son altamente preocupantes. En cuanto al legislativo, el Con– greso y los partidos contaban en 1997 con los niveles más bajos de Confianza de la ciudadania de todas las instituciones medidas, con una pérdida adicional del 15% para el 2005 (2007,170). DlJN, Por sus siglas Distritos Uninominales.
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NzAxMjQz