Libro

'1 SEXTC PANH ·t,1UJEI? V CO NHIC tC A '!MAOO . A CA',>GC OE ~AS l<EPPH ElilAl'tl O OE c -..GAl~IZAC IONES $0CIAUS Tambiénque la norma!lza,clón de la violencia sexual llegue a extremos en que en casos de embarazos en niñas menores de 14 años produ,cto de violencia. sexual, se atiendencomo conru!ta ginecoiógka de rutina y que esmínima ta información sobre ta lnte1ru:pclón voluntaria del embarazo como un derecho, eso no se oye por ningún lado, no se promueve y mucho menos se neva a la práctica. Frente a estas barreras que constatamos día adianos parece muy Importante resa}tarla propuesta.de lasJoma.das de documentación y denuncia colectiva.que han venido haciendo las compaheras de M1dtrSl9ue Mis Posos, porque a!í 5' se evidencia con este modelo que ahora Marfa Eugenia nosva a contar que cu.ando hay garantías contra las denuncias sí están dispuestas a hacet!o, pero que esas garandas pasan por una disposlc.16n lnslifuelonaldiferente, por una lnstltuciona!idad que se acerque a la.sW:timas, que ofre2ea confianza, pot espaciOs simultáneos de acompai'lamlento sicosocla!, de asesOf'la pol:ítka y Jurídk:a y por una estrategia qt.ie haga que !as Tnstitueiones se articu!en para que una sola versl6n, un soh testimonio de la vtctlma sea suficiente y no tenga que hacer el recomdo de Institución en 1nsti1uclón, que es e! que tanto afecta a lasvíctmas, porque lasvíctimas vuelven a contarles to mJsmo e Intentan corroborar y asegi.irar que no están mintiendo. También en el trabajo con au1olidades polítkas 'I es.pirltuales de comunidades Indígenas'/ con la.s mujeres hderesa.s hemos constatado barreras en el ejercic.iO en susJusticias propias que también nos parece Importante, en esta CO)'Untura, resaltar una, es la necesidad deconstruir acuerdos alrededor de cómoprevenir }"SanciOnar la vlolenc.ia sexual en las comunidades ln<ffgenas. Conocemos casos muy interesantes como el pueblo Na.sa en e: Cauca, con sus caminos de acompahamlento de vfetlm.as de violencia sexu.a~ elcaso de la OIA Organtzaeión lndlgena de Antioqula, con la constnm:lón de reglamentos intemos con pe'l"Spectlva en género >' sus comunidades que abordan la prevención y la asunción de ta \llolencla sexual Pero en la ma)'Orfa d,e !as comunidades lndlgenas y espt. "cffie.tm <'nw en las de Putumayo PS t.Jna ta1Qa poi h:w:<'1, es a!go que no $1' ha trabajado. Tambi4n QUi""1i!S ~j<'rOP.n Juslt<'la pt01>la y fo 1<'oonooon fas :iiutoiidadi/s con qul<'1H!S hPm()S traOOJado, 1equie-ren icctMOS y capacitación paia hae<>1 <'foctwa su juinici11 en casodP delitos g<avPS. Estamos habf,lndo d<' viotPnCia $Pxual, rc,conoC<"n qu,e h.an !legado a acuc1dos pata abordai situacioni!s d,e h()inicidios, siwación de v«')!t."ncia intiafami!iar, incluso alguna¡; Si{oaciOnes rl<' robo¡;, de p1PSPnCia d<" armad()$ y sus wnito<io¡;, pero nunca han habfado dP cómo prPv('nir y sanciOn.ar las viotPn,ci:ls St.l(ua!es. Es un wma q-tJP SP calla, qt.N? <"Stá i.ovl:Sibilzado, 11$1 como l"-St<1 i1wisibi!i1ado en ta SOCIPdad y <"n las comunidades afr0$ y dPI qu<' mt.1.cha¡; vPr<>$ S4? abrPn es1>aci0s CONSQO SU"'l!IOI! et U, F,JOICAnJRA