Libro

l 5 C O Nff0fNC IA U UJ f Ph .lllil•CIA V C ONll l?0CC 1CN" O f LA PAZ tos operadores dejusticia que han tenido qu,e enfrentarse a perseguir este tipo de delitos; en este sentido, cons.dera.mos qu,e más a!!á dela nomiatMdad existente. hay temas muydtficdes ycomp!ejosen el momentod-e hablard-ejustlda para !asmujeres. No pod-emos hablar deJusticia para las mujeres en sentido general. La pregunta inicial, ysin duda estructural, es ¿qué es !o que qu\.eren las mujeres de laJusticia? Ycreo que eso es lo primero que debemos preguntarnos a la hora de abordar este tema. Yad-emás ¿que mecanismos propios han desarrollado las muj-eres para acced-er a la justkia? Esto lmptica una mayor participación para las mujeres tanto en la admJnlstradón de la justkla, como en el diseho de !a normattvld.ad y el a~ceso directoa la misma, "I aqufrecuerdounosdatosque proporcionaba ayerel MaglStrado Néstor R.ati! Correa que nos parecían muy lnteresantes, si hablamos de quienes estamos admJnlstrando laJusticia. Néstor Rad.! nos daba datos de !os Juzgados que representan las mujeres un S1%, en ~s. tribunales ul\ 37%yen las Attas Cortes un 27%, y hacía mención sobre ta pirámide lmrersa en el acceso a tos n111e!es más a.'tos de fa justleia col:omblana en témtlnos de la pro-..1sl6n de Justkia por parte de las mujeres; esto es atgo que nos tiene que hacer reíle:xlonar con respecto a la propia estructura de 1.-. Justk:ia cohmblana, en el senudo de reconocer tos Intereses y necesidades de !as mujeres. /1.dieionalmente, qulslera dar ul\Os datos en este segimdo pulltoque me parecen m\J'/lmponantescon base en un estudio que apoyó !as Naciones Unidas Mujeres, en el at'lo 2010, en el cual se h.tzo una muestra bastante amp!ia basada en encuestas en distintos departamentos de! país con respecto a ta percepciónque tentanlas mujeres respecto a !a toleranciahada la ',lk>leneia ,¡concretamente la tolerancia Institucional Y!es quiero plantear unos cuatro o dnco datos en el caso de la admlnlstradón dP lajustiei,a, 12n téiminos d-e la tol<'1anci11 institucion~ hacia la 'oliot,ncia. En ptimet lugar, 62" del total d-e \IÍCtimas d"' 'oliot,n,ci.'l S('x1Jal PnCOPStadas no d~unciaron, ,('lltr<: !11$ mujeu"'S \IÍctimas (I(" 'oliot,nci.a fl(' ghiMO qui." incluía 'oliot,ncl;i sexual, pPro no<'St11b11 ,,str".ngtd11 $OIOa ("!la, d"'nunci11ton 42% p<"io no<: ont.an) fl con apo)'O "º !11 (l("nunci.a. Las jd•,'<'nes •ktim/1$ \"ntte !os )2 y 17 anos son las que n'H'nos contaron con apo>'◊ pa1a d\ "nunci.ar . Frl"ntf." a 111$ ml~Pres<:nt1e !os 31 y 64 anos poi 4matotasque m,b contai'On <:on apO'fO pa1a dPnunciai fuPron fas ml~e1es del P$h'ato 6: un 61% y t/1$ qu"' n'H'nos Íll('ion las mujMes de tos esmnos 3 y l: 18 y 20'1(., respl'(tivam<"nte. AdiCiona!nwntf.", el 26% de las mujM'-$ que 1<'CU1l'°M't'()n, poi ej,mplo, a la Comis31fa d"' fami~II, el 299' de l/1$ r¡1;1c re<:ull'ie<on a la F'isca!í.a, <!! 42% d"' las qu\" CONSQOSU"'F.l01!OEUt.JOIC.\T,JR>,